domingo, 7 de junio de 2009

Caminos Infinitos

Hoy no va de bajos. Estaba estudiando unos, no demasiado desagradables, apuntes infinitos de Teoría del Conocimiento, cuando un domingo más, semifortuitamente (un compañero me preguntó hace un par de días cuándo era su emisión y no lo recordaba con precisión), me dispuse a ver Redes.

Hablaban de Teoría de cuerdas, de universos paralelos, infinitos, que poseen una combinatoria finita. En otras palabras, el eterno retorno de Nietzsche. Eduardo Punset, metafísica ciéntifica, pero que últimamente ha sufrido un giro radical en mi perspectiva, pues ahora se ha convertido en belleza, en vez de ser mero credo. La creencia como lo bello, como el espacio a nuestra humanidad. El ateismo humanista. La perfección y la omnisciencia son el asesino de cualquier creencia humana. El Dios cristiano es por ello bastante aburrido y opresor, es un Dios hecho a medida de nuestra racionalidad, no es un Dios incomprensible, somos nosotros mismos en forma de proposiciones perfectas.
Espero poder distanciarme del misticismo que rechazo, para mí la mística no es lo que queda fuera de la vida, la vida y lo (mi) místico son lo mismo, lo que hay dentro, y como Antonio Vega o Spinoza no tenemos miedo de hablar de ello en proposiciones o lenguaje científico (búscate a otro para convencer con tu Tractatus, Widgestein). Al acabar el programa suena estra canción de Antonio Vega, cuando yo 5 minutos antes no podía dejar de pensar en la letra de Océano de Sol. Es preciosa la metáfora que la casualidad hace con nuestra imaginación, creando el destino. Hoy esta canción era mi destino.

2 comentarios:

  1. Me he emocionado leyendo esto. No conocía la canción, y es un pasadón, te deja muy tocado.

    Un camino de adentraba
    en los campos que soñé.
    Con él otro se cruzaba,
    el camino del saber.
    Y yo en la encrucijada
    busco la respuesta a un por qué.
    Busco el camino infinito
    el que va desde el nueve al diez

    ResponderEliminar
  2. Me parece lógico que a día de hoy se esté llegando a esas ideas, en una sociedad en la que toda fé está tan desgastada y roída y prostituida por la propia indisciplina y por cincuenta factores más, ya iba siendo hora (para vosotros o o para quién sea, no para mí, esto no quita que piense que sóis unos hippies asquerosos) de volver a creer en lo inexplicable. En el fuego, en el trueno y en la lluvia y la nieve.

    Ya que mencionas la Teoría de Cuerdas, me parece muy pajillera (opino burdamente desde mi ignorancia porque me la han explicado como buenamente han podido), todas esas teorías del todo...

    En fin, lo que quería decir es MUÉRANSE HIPPIES DE MIERDA. No crean en ustedes mismos y no se engañen con la creencia. El único conocimiento pleno llega con la liberación de la muerte.

    ResponderEliminar